Buenos días a tod@s!
Como sois much@s los que me habéis preguntado en más de una
ocasión por el tema, hoy quiero hablaros de la diferencia existente entre hacer
running al aire libre o correr en la cinta estática.
Correr en la cinta, como todo en esta vida, tiene sus
ventajas e inconvenientes, y hay personas que están a favor y otras que están
en contra.
Entre los “pros” que podemos encontrar si nos decantamos por
la cinta estática, obviamente se encuentra el factor climatológico. Y es que,
la lluvia o el viento ya no serán una excusa para poder realizar algo de
ejercicio cardiovascular.
En estos meses de invierno es habitual querer salir a la
calle a practicar un poco de running, y no poderlo hacer debido a factores
atmosféricos ajenos a nosotros. En estos días, utilizar la cinta estática es
una buena alternativa.
De igual modo, cuando no disponemos del tiempo suficiente, el
mejor sustituto es correr en cinta.
Otra de las ventajas que tiene correr en la cinta es que, en
general, la superficie de las cintas suele ser más blanda que el asfalto, por
lo que si tenemos alguna tipo de molestia o dolor articular, correr en la cinta
nos ayudará a que la articulación no sufra tanto debido al impacto.
Sin embargo, si no tienes ninguna lesión ni dolencia, sin
duda te recomiendo que optes por correr al aire libre.
Al correr en la calle, haces mucho más esfuerzo que en la
cinta y trabajamos mucho mejor la zancada natural.
Esto es debido, por un lado, a que en la cinta, al no
movernos, no tenemos que vencer la resistencia del aire, por lo cual, el
esfuerzo será bastante menor. Y por otro lado, hay que tener en cuenta que al
correr en asfalto, el corredor “tracciona” el suelo, mientras que en la cinta
estática es la propia superficie de la cinta la que se mueve, y el corredor
tiende a dar una especie de “saltitos” verticales en el aire.
Otra de las “virtudes” de la cinta estática es que podemos
controlar casi al 100% nuestro ritmo, sin aceleraciones ni obstáculos como
farolas, señales de tráfico, coches, etc…
En cambio, un claro “contra” es la monotonía, y es que,
correr mirando una pared, puede resultar bastante aburrido, lo cual puede ser
causa de abandono del entrenamiento.
Otra desventaja es que al hacer mucho menos esfuerzo que en
la calle, quemaremos bastantes menos calorías.
Además, no debéis fiaros al 100% de los datos que os marque
el panel de la cinta estática (pulsaciones, calorías, velocidad…), ya que en la
mayoría de los casos, las cintas están mal calibradas.
Definitivamente, si queréis progresar, batir marcas,
prepararos para una carrera, etc…opta por correr al aire libre. Correr en la
cinta no es un buen simulador de lo que podemos hacer después en una carrera.
Para madurar y desarrollarse como un buen corredor, es
fundamental aprender a cambiar el ritmo y tener una buena técnica en la
zancada, y esto sólo se consigue entrenando en asfalto.
Por último, aunque soy totalmente contrario a correr en la
arena de la playa, si decides correr por este terreno, hazlo cuando la marea
esté totalmente baja, y elige los tramos lo más horizontal posibles.
Si piensas que esta información puede resultarle útil a
cualquiera de tus contactos, no lo dudes y compártela.
Un saludo fuerte, feliz semana!
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